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La BNM ha tenido el honor de recibir por voluntad testamentaria la biblioteca privada de María Hortensia Lacau, compuesta por un número que se estima en los cuatro mil volúmenes. El legado, que constituye sin duda un fondo de alto valor académico y científico, se encuentra actualmente en proceso de revisión, luego de lo cual serán realizadas tareas de preservación y catalogación del material.

María Hortensia Lacau, autora de una extensa producción literaria y didáctica nació el 30 de octubre de 1910 y falleció en la Ciudad de Buenos Aires el 12 de enero de 2006.

Maestra Normal Nacional, Profesora de Enseñanza Secundaria en Castellano y Literatura, y autora polifacética de una extensa obra, Lacau tuvo una amplia trayectoria en el campo de la Educación y dejó sin dudas una huella imborrable en generaciones de docentes argentinos.

El fondo bibliográfico legado por Lacau embarca una vez a la Biblioteca Nacional de Maestros en la grata tarea de preservar el patrimonio cultural y educacional del país, al tiempo que lleva a cabo su vocación de poner al alcance de todos los docentes los materiales que enriquecen y sostienen la historia de nuestra educación.

Links relacionados:

     

  • “Un largo adiós María Hortensia Lacau”
  • Biografía
  • Breve biografía en Wikipedia

4 pensamientos en “El legado de María Hortensia Lacau en la BNM”

  1. Me recibí de maestra em 1959, en el Normal Nº4, cuando María Hortensia era rectora. Por fortuna estuve en uno de los cursos (5º 2º) que participaban de la experiencia piloto que proponía un cambio radical en la formación de las futuras maestras. Experiencia que me marcó para siempre. Lamentablemente, la sacaron del cargo y después figuró en la lista de autores y libros prohibidos durante la dictadura. Injustamente no recordada ni reivindicada como personalidad destacada de la educación. Gracias, María Hortensia por todo lo que nos diste .

  2. Recuerdos que marcan.
    Año 1957
    _Pase, me dijo, y casi me desmayo.
    _Siéntese _ y me ofreció un sillón rojo de terciopelo _Ya que es delegada, la invito a organizar con sus compañeras del Centro de Estudiantes, el acto de homenaje a Sarmiento.
    Mi cara se debe haber confundido con aquel sillón porque me ardía más que cuando pasaba a dar las lecciones de historia.
    Y fue el mejor acto, así lo creímos todas.
    Era maga. Nos invitó a pintar los salones con dibujos de nuestra creación. Elegante y altiva, recorría las aulas para apreciar los dibujos. Nos felicitaba y nosotras íbamos hasta los domingos.
    ¿Directora y profesora de Literatura? Sí. ¿Lecciones de memoria? no, mejor representen las obras en el escenario del colegio, nos decía, y amábamos la materia.
    María Hortensia de Lakau, Directora del amado Normal Nº 4.
    ¡MAESTRA! ¡Gracias por tu ejemplo!

    1. Hola, Lury! Gracias por compartir tan bello recuerdo! Hermosas tus palabras.

  3. Andando la vida fue que aprendí el valor de celebrar la memoria de los maestros. Esos que te van dejando improntas en el pensamiento y en los afectos. Esos entrañables.
    En mi lista personal el nombre y la figura de María Hortensia, (la Lacau) brilla con su seducción, su frontalidad, su integridad, su pensamiento joven. Fue mi profesora en el Normal 4, que ella dirigió con audacia, y fue mi “consultora personal” a lo largo de la vida en temas docentes, autorales, editoriales.
    Lo grande es que no soy yo solamente. Sé de muchas amigas y colegas que quisieran decir lo mismo que yo estoy escribiendo ahora sobre María Hortensia. Por si ellas no se asoman a esta página, permítanme que lo que digo sea también en su nombre.

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