Los días 
                5 y 6 de septiembre viajé a Paraná, Entre Ríos, 
                a fin de brindar la Segunda Instancia de Capacitación en 
                el software de gestión Aguapey 
                para las bibliotecas de las escuelas y sedes que conforman la 
                Facultad de Humanidades de la Universidad Autónoma de Entre 
                Ríos.
                Nos encontramos tempranísimo con Virginia Waldner, coordinadora 
                de las Bibliotecas de la Facultad de Humanidades de la UADER, 
                en la biblioteca de la Escuela Normal de Paraná y desde 
                allí partimos hacia Oro Verde, distante 10 kms. El curso, 
                desdoblado en dos, se brindó nuevamente en el aula informática 
                de la Escuela Normal Rural Juan Bautista Alberdi, dirigida por 
                Laureano Khün, quien nos dio la bienvenida apoyando las actividades 
                de capacitación que se realizan en dicho establecimiento. 
                También contamos con la presencia de Daniel Richard, Coordinador 
                del Nivel Superior UADER- Facultad de Humanidades Subsede Alberdi.
                En esta segunda etapa de capacitación en el software Aguapey-DOC 
                se desarrollaron los módulos que habíamos dejado 
                pendientes: catalogación por copia desde internet, catalogación 
                de analíticas, utilitarios y circulación. 
                Fue un gusto reencontrarme con los asistentes, recorrer con ellos 
                las dudas de Aguapey y recoger las sugerencias que surgieron con 
                su uso; compartir estas jornadas intensas pero interesantísimas 
                entre profesionales con tan buena predisposición y motivación.
                Nuevamente, el personal de la Escuela Rural nos atendió 
                de maravillas durante todo el encuentro, brindándonos su 
                hospitalidad, su comida casera y su asistencia en todo momento.
                Obviamente, esta vez también pudimos comprar, en la despensa 
                de la Escuela, los dulces de leche y quesos caseros que nuestras 
                familias nos encargaron luego del primer encuentro, fabricados 
                por los alumnos de la Institución.
                “Siempre es agradable volver a Entre Ríos” 
                puse en mi anterior nota, y una vez más lo siento: la calidez 
                de su gente, la belleza de esa ciudad volcada al río, la 
                profesionalidad de los asistentes de la UADER, la atención 
                del personal de la Escuela Rural Alberdi, son motivación 
                para jornadas de trabajo tan intensas como productivas.
                
              Bibl. 
                Sandra C. Casas